La Toscana, famosa por sus paisajes pintorescos, su rica historia y su deliciosa gastronomía, se transforma en un escenario mágico durante el invierno. Mientras las colinas onduladas y los viñedos se cubren de una ligera capa de nieve, la región ofrece una variedad de actividades y propuestas encantadoras para disfrutar durante la temporada invernal. Pensando en San Valentín es interesante tener en cuenta este lugar.

Recorre encantadores pueblos medievales como San Gimignano, Monteriggioni y Volterra. Sin las multitudes veraniegas, podrás sumergirte en la auténtica vida toscana y explorar callejones empedrados y plazas históricas. Son propuestas románticas para disfrutar en pareja. Ahora es un buen momento de darse un paseo por esta zona de Italia.


Aunque las vidas están inactivas en invierno, las bodegas de la Toscana siguen abiertas y ofrecen degustaciones de vinos. Disfruta de catas íntimas junto a la chimenea y aprende sobre la producción vinícola local. Otra de las recomendaciones es acudir a las termas y relajarse en ellas. Estos oasis de bienestar ofrecen una experiencia rejuvenecedora mientras disfrutas de las vistas de la campiña invernal.

Disfruta de la cocina local de temporada. Prueba platos invernales reconfortantes como la ribollita (una sopa tradicional), pappardelle con ragú de jabalí y castañas asadas. Descubrir los sabores tradicionales de la zona es siempre algo que suele atraer a muchos turistas.

Aunque el invierno puede ser fresco, las caminatas por la naturaleza ofrecen la oportunidad de admirar la belleza serena de la Toscana invernal. Explora senderos que serpentean a través de olivares y bosques. Dirígete a las estaciones de esquí en los Apeninos, como Abetone, para disfrutar de la emoción del esquí y el snowboard en un entorno montañoso impresionante. De esta forma se puede disfrutar de actividades propias del invierno, para que los más aventureros puedan vivir grandes experiencias en pareja. Fuente: porconocer