Da igual visitar París en febrero o hacerlo en agosto. Esta es la ciudad considerada la más romántica del mundo, así que siempre se puede visitar y hacer que sea un placer hacerlo en pareja. No solo se puede considerar que el total de la capital francesa ofrece ese aroma que invita a disfrutar en pareja, sino que hay rincones donde se puede estar mucho más a gusto con la persona amada. Vamos a darte algún consejo sobre qué visitar para darle un toque aún más romántico a tu viaje.

La Torre Eiffel y sus alrededores

Pocos lugares hay más evocadores que esta gran torre metálica. Subir hasta la plataforma más alta y contemplar la ciudad que se extiende a los pies es siempre algo maravilloso que no se puede dejar pasar. Pero la Torre Eiffel ofrece más cosas que unas espectaculares vistas desde lo más alto.

Por la noche, se encienden las lámparas que la convierten en un espectáculo único en el mundo. Es tan especial que tiene reservados los derechos de imagen de esos juegos de luces. Así que ten cuidado con publicar esas imágenes o vídeos, porque son muy celosos de ese espectáculo de luces y podrían hacer que los retires de tus redes. Y eso, mira, no está mal. Porque no hay nada como ver esos juegos luminosos en vivo, con la pareja.

Una en un crucero por el Sena

A pocos metros de la Torre Eiffel se encuentran los muelles del Sena. Desde ellos se puede acceder a un crucero por el emblemático río parisino. Se puede hacer de varias maneras. Desde el uso del autobús fluvial, un barco que funciona como un autobús urbano, pero por el río, o disfrutar de una cena en un barco, mientras se navega.

Obviamente, te vamos a recomendar la segunda opción. Es una experiencia única que se debe experimentar en pareja. Pocas cosas hay más románticas que una cena con la persona amada mientras se navega por el Sena. Hay varias opciones, pero hay que saber que no resultan especialmente baratas. Pero bueno, un día es un día y la ocasión lo requiere.

Los Jardines de Luxemburgo

Estos jardines están ubicados en el Barrio Latino, detrás del Pabellón de Ilustres. Este parque público fue en origen el jardín del palacio ocupado por Maria de Médeci, que se trasladó desde Versalles hasta París en el siglo XVII. Muchos parisinos y visitantes pasean por este jardín de 22,5 hectáreas, paseando por los caminos que se abren por sus paseos arbolados. Muchas esculturas y zonas de césped para tumbarse a disfrutar del sol, en los meses primaverales y estivales, lo convierten en un rincón de París perfecto para descansar y disfrutar de momentos tranquilos.

El mural del «Te Quiero»

Este mural está ubicado en el barrio de Montmartre y recopila unas 1 000 maneras de decir «Te Quiero» en 300 idiomas y dialectos diferentes. Es obra del diseñador Fréderic Baron y si hablamos de sitios románticos, no hay que perdérselo. Además, este barrio de París es uno de los más visitados y más fotografiados de la ciudad. Callejear por él puede llevarte a encontrar este muro decorado con más de 500 azulejos de lava esmaltada con este texto repetido.

Lo vas a encontrar en la plaza de Abesses, así que para llegar podrás pasear por este emblemático barrio y sentirte como un parisino más. Fuente:porconocer