El otoño es una de las épocas más mágicas para visitar Austria. Los paisajes alpinos se visten con una paleta de colores cálidos, los viñedos maduran bajo los últimos rayos del sol, y las ciudades históricas se llenan de festivales tradicionales que celebran la cosecha y el vino. Austria es un país donde la naturaleza, la cultura y la gastronomía convergen, y el otoño es el momento perfecto para explorar sus paisajes y tradiciones.

El Valle de Wachau, situado a lo largo del río Danubio, es uno de los destinos más pintorescos de Austria, especialmente en otoño. Los viñedos de la región, reconocidos mundialmente por sus vinos blancos, como el Grüner Veltliner, adquieren tonalidades doradas y rojas en esta temporada. Se pueden hacer recorridos por los viñedos, practicar ciclismo, entre otras opciones.


La ciudad de Salzburgo, famosa por ser el lugar de nacimiento de Mozart y escenario de la película «The Sound of Music», es un destino espectacular en cualquier época del año, pero en otoño, su encanto se ve magnificado por el contraste de sus iglesias barrocas contra el fondo de montañas nevadas. Recomendable es disfrutar por el casco antiguo, conocer los festivales culturales y también conocer los Alpes.

El Tirol es una región montañosa en el oeste de Austria, famosa por sus paisajes alpinos, y en otoño, es un destino ideal para los amantes de la naturaleza y el senderismo. Los colores otoñales hacen que las rutas de senderismo y los paseos por los valles y montañas sean aún más atractivos. Los pequeños pueblos alpinos del Tirol, como Alpbach o Ellmau, son perfectos para relajarse después de un día de senderismo, disfrutar de la gastronomía local y descubrir la arquitectura tirolesa tradicional.

Hallstatt es uno de los pueblos más fotografiados de Austria, y no es difícil entender por qué. Situado a orillas de un lago y rodeado de montañas, Hallstatt se convierte en un verdadero cuento de hadas en otoño. Las casas pintorescas reflejadas en el lago y las montañas cubiertas de colores otoñales hacen de este lugar una parada obligada. Fuente: porconocer